
El aposento 102
Iba por un pasillo, a mi izquierda habían una hilera de cuartos, se me invitó a entrar al primer cuarto, ahí había un grupo de personas, ese cuarto representaba el salmo 102. Sabía que después del cuarto 102, seguía el 103 que representaba el salmo 103. Fue algo rápido y luego desperté. Después busqué ambos salmos. Y vi como el primero, o sea el 102, narraba el sufrimiento de alguien. Mientras que el 103 narraba la bendición de Dios sobre ese alguien. Y pensé, que así es en la vida, en unos momentos vivimos el salmo 102, pero luego nos habrán de venir las bendiciones del salmo 103.